El gobierno español quiere que el Parlamento apruebe el envío de 140 soldados más a Afganistán

Viernes 21 de abril de 2006

 Según el periódico El País en su edición impresa del viernes 21 de abril "España decidirá en los próximos días el enviar otros 140 soldados a Afganistán". De esta forma el total de militares españoles desplazados a este país ocupado por los EEUU y sus aliados (España entre ellos) ascenderá a 680. Una vez más hay que recordar que las características del conflicto afgano y de su ocupación guardan muchas similitudes con las de su vecino Irak, como reiteradamente se ha denunciado, siendo igualmente ilegítimas y rechazables ambas ocupaciones.

En esta misma web se pueden consultar los siguientes artículos al respecto:

Afganistan: Elecciones con libertad dudosa (23/09/2005)

¿Qué diferencia existe entre Afganistán e Irak? (05/09/2005)

Afganistán no es diferente a Irak (19/09/2005)

Afganistán y Haiti: El Parlamento español cede ante los EEUU (09/07/2004)


Alonso pedirá autorización al Congreso para enviar más tropas a Afganistán

(Firma: G. Bareño | Lugar: la voz de galicia | madrid | 21-4-06)

La vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, anunció ayer que el Ejecutivo solicitará al Congreso la autorización para aumentar el contingente de tropas españolas desplegadas en Afganistán. De la Vega explicó que «los últimos incidentes», en referencia al ataque que recibió y repelió una patrulla de la Legión el pasado sábado, aconsejan esa medida para dar mayor seguridad a los soldados allí desplegados. En todo caso, añadió que será el nuevo ministro de Defensa, José Antonio Alonso, el que determine durante una comparecencia en el Congreso la cantidad suplementaria de efectivos que España está dispuesta a enviar a Afganistán.

Alonso aprovechará una comparecencia ya solicitada a petición propia para informar sobre las líneas que seguirá en su nuevo cargo en Defensa para hacer la preceptiva solicitud al Congreso antes del envío de tropas a una misión al extranjero.

Antes de conocerse el anuncio de De la Vega, tanto Izquierda Unida como el PP habían solicitado la comparecencia de Alonso en el Parlamento para que informara sobre el incidente de las tropas españolas y sobre la posibilidad de ampliar el contingente.

En este momento, España mantiene en Afganistán 540 efectivos en una misión internacional bajo el mandato de la ONU para la pacificación y estabilización de este país.

El pasado sábado, un grupo de militares españoles, compuesto por 32 legionarios, repelió un ataque de cuatro o cinco personas en Adrascan, localidad a 60 kilómetros al sur de Herat (Afganistán), sin que se produjeran heridos ni detenidos.

Por otra parte, los cuatro militares españoles heridos el miércoles al volcar el vehículo en el que viajaban entre las localidades de Herat y Qala i Naw se encuentran ingresados en observación en el hospital de la base de Herat tras ser atendidos de diversas contusiones.

Un sargento y tres legionarios resultaron heridos leves al salirse de la carretera el Vantac (vehículo militar todoterreno blindado) que se desplazaba junto con un convoy de siete vehículos de este tipo entre ambas localidades del oeste de Afganistán.


La Legión repele a tiros el primer ataque contra las tropas españolas en Afganistán

MIGUEL GONZÁLEZ - Madrid

EL PAÍS -  España - 18-04-2006

Una patrulla de reconocimiento de la Legión, integrada por 25 militares, repelió a tiros la noche del pasado sábado un ataque de fusilería a unos 50 kilómetros al sur de la Base de Apoyo Avanzado (FSB) de Herat, al oeste de Afganistán, según han confirmado varias fuentes militares. El ataque, en el que no hubo bajas entre los militares españoles y al parecer tampoco entre los agresores, es el primero que se dirige directamente contra las tropas españolas desde su llegada a dicho país, en enero de 2002, y constituye un nuevo peldaño en la escalada de violencia.

La sección de la Legión, al mando de un oficial y a bordo de Vehículos de Alta Movilidad Táctica (Vamtac), estaba reconociendo una ruta al sur de Herat, según las fuentes consultadas. Su misión incluía pasar la noche del sábado al domingo en el trayecto, por lo que los militares se disponían a vivaquear (pernoctar al raso en sacos de dormir) cuando fueron atacados con armas ligeras, probablemente fusiles Kalashnikov.

Los legionarios abrieron fuego y, tras varios minutos de intercambio de disparos, los agresores se dieron a la fuga, según las fuentes consultadas. Por parte española, ningún militar resultó alcanzado, aunque al menos un proyectil impactó en un vehículo de la Legión.

Las mismas fuentes admiten que no se ha podido determinar el número ni la identidad de los agresores. La principal duda es si éstos venían siguiendo a la patrulla de la Legión y aprovecharon su momento de mayor vulnerabilidad -cuando los militares bajaron de los vehículos- para atacar; o si trataban de ahuyentarles de una zona en la que su presencia era especialmente incómoda, tal vez una ruta del narcotráfico.

En cualquier caso, se trata del primer ataque directo contra las tropas españolas desde su llegada a Afganistán, en enero de 2002. También es un salto cualitativo en la escalada de violencia en la zona oeste del país, donde está la Legión, hasta ahora relativamente tranquila.

Incidentes en aumento

El 20 de diciembre pasado, tres soldados italianos resultaron heridos en un ataque suicida en la carretera que une Herat con su aeropuerto, donde hay unos 300 militares españoles. El 20 de febrero, fue atacada con cohetes la sede del Equipo de Reconstrucción Provincial (PRT) de Farah, bajo responsabilidad de EE UU, donde se encontraban en ese momento 25 legionarios que habían acudido a reforzar su seguridad. La misión de la Compañía de Reacción Rápida (QRC) de la Legión destacada en Herat es precisamente acudir en auxilio de los PRT de la zona oeste de Afganistán en caso de problemas.

Con la llegada de la primavera, éstos se han multiplicado: el 8 de abril, un terrorista suicida detonó un coche bomba en el Centro de Coordinación Regional de la OTAN en Herat. Tres afganos murieron. Y al día siguiente, cinco sanitarios afganos fueron abatidos en una clínica, luego incendiada por los atacantes, en la localidad de Darrah-i-Burn, en la provincia de Badghis, bajo responsabilidad española. El ataque a la patrulla de la Legión se produjo una semana después, durante la noche del 15 de abril.

El acelerado deterioro de las condiciones de seguridad en el oeste de Afganistán coincide con la ofensiva que tropas de EE UU desarrollan en el este y sur del país, donde el pasado fin de semana mataron a 50 talibanes y a seis policías afganos, estos últimos por error.

Desde hace meses, los mandos militares vienen reclamando un aumento del contingente español en Afganistán, fijado ahora en un máximo de 540 efectivos. El anterior ministro, José Bono, impuso una moratoria a la petición, que sólo se formalizó hace dos semanas a través de una nota del jefe del Estado Mayor de la Defensa, Felix Sanz, en la que solicitaba al menos 140 soldados más.

Este refuerzo, admiten las fuentes consultadas, no garantiza que no haya bajas, "pero sí que se han tomado todas las medidas que recomiendan los expertos para evitarlas".

La dimisión de Bono y su relevo al frente de Defensa por José Antonio Alonso ha dejado en suspenso el aumento de tropas, que debe ser sometido a la aprobación del Congreso.

Refuerzo o retirada

Izquierda Unida lo tiene claro. Su coordinador, Gaspar Llamazares, cree que la solución no es mandar más tropas españolas a Afganistán sino retirar las que hay. El Gobierno también parece tenerlo claro: la misión en Afganistán tiene el respaldo de la ONU y no puede compararse con la invasión ilegal de Irak.

Sin embargo, cada vez que los mandos militares plantean un refuerzo del contingente, su demanda se eterniza o cae en saco roto. La razón es clara: la presencia en Afganistán tiene escasa simpatía entre la opinión pública, según los expertos. La mayoría o ignora la presencia militar española en Afganistán o se opone a la misma. Más lo primero que lo segundo.

Y, sin embargo, el coste de la operación es considerable y va en aumento. España se ha comprometido a invertir 150 millones de euros en la reconstrucción del país, al margen de los 100 millones anuales que cuesta el contingente militar. Sin contar con las bajas que ya se han producido en accidente (62 del Yakovlev y 17 del Cougar) y las que podrían producirse en combate. Para convencer a la sociedad de la bondad de la operación, Exteriores y Defensa planean celebrar un seminario en Madrid a mediados de mayo, al que están invitados varios ministros del Gobierno de Hamid Karzai.

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