Salvatore Cannavò* / Vientosur
La crisis del “ miércoles de ceniza” del gobierno italiano, desatada por su orientación en materia de política exterior, se resolvió con una reedición, esta vez como farsa, del gobierno Prodi bis. Una hábil maniobra “neocentrista” , con la incorporación de sectores del centroderecha a la nueva mayoría parlamentaria en el Senado, ha permitido clarificar, a nivel general, la orientación socialliberal y militarista emprendida en la primera fase del gobierno y expresada principalmente a través del envío de tropas al Líbano, el mantenimiento del contingente en Afganistán, y la impronta antisocial ticket sanitario, aumento de los gastos militares, recortes en educaciónde la ley de presupuestos generales para el 2007. La agenda para esta “ fase dos” , recogida en los llamados “ doce puntos de Prodi” , constituye la base programática que ha permitido compactar la nueva mayoría, revelar el contenido real del programa de
.
La reciente crisis del gobierno Prodi ha jugado el papel de acelerador de la reorganización de la izquierda italiana. Nos limitaremos aquí a presentar el desarrollo de los principales proyectos de la izquierda italiana, que la van a transformar de forma fundamental en el curso de los próximos años, cuando no en algunos meses.
Partido Demócrata
El nacimiento futuro del Partido Demócrata es un proceso bastante conocido. Su lanzamiento no corre el riesgo de fracasar ante las múltiples contradicciones internas que lo atraviesan, pues se alimenta del empuje “ unitario” y del acuerdo fundamental alrededor de la visión “ liberal” . La unidad, tan abstracta como profundamente reclamada por una parte amplia del electorado de centro izquierda, que teme sobre todo a la derecha y la “ vuelta de Berlusconi” constituye en efecto el ingrediente esencial que permite acabar el acto de transformación de la izquierda proveniente del Partido comunista italiano.
Con el nacimiento del Partido Demócrata cuyo proyecto ha sido aprobado por los recientes congresos de los Demócratas de Izquierda (DS salidos de la mayoría del exPCI) y de
Hoy se llega “ finalmente” al lanzamiento, del que se trata desde hace más de un decenio, de esta fuerza liberaldemócrata, con una coloración progresista. Una fuerza totalmente socialliberal, que dispone de los votos de una gran parte del mundo del trabajo, sin que este último constituya su eje central, pues esta fuerza estará bajo la tutela de los intereses de una parte consistente de la burguesía italiana, la representada por las grandes empresas y la banca con vocación europea.
Nuevo Partido de
El otro proyecto, menos visible pero ya en curso, acabará sin duda por adoptar el nombre de “ Partido de
La primera crisis proviene de la derrota del ala izquierda de los DS. En el último congreso (1921 Abril 2007 en Florencia), el secretario general Piero Fassino ha triunfado sin dificultades con el apoyo de cerca del 75% de los mandatos, mientras que la izquierda no ha superado el 15%. Quienes se oponían al proyecto del Partido Demócrata han sido barridos y no han sabido encontrar una respuesta adecuada.
La segunda crisis es la del Partido de
Tras la manifestación de Vicenza, tras el voto sobre Afganistán que ha visto al gobierno Prodi ganar en el Senado, con el apoyo de la derecha, a pesar del voto contrario de Franco Turigliatto /3 y la no participación de varios senadores de la izquierda, y tras cerca de un año de gobierno Prodi, las tres hipótesis que sustentaban el proyecto mayoritario en el congreso no han sido verificadas:
• La idea de que las correlaciones de fuerzas podían permitir un gobierno de “ Gran Reforma” ha sido pulverizada por el resultado electoral del 9 de abril de 2006, que ha hecho aparecer un país cortado en dos y en el que las fuerzas de izquierda están claramente marginadas, no representando más que el 2627% del electorado.
• La idea de que el centro izquierda había cambiado desde 1996 (el año del primer gobierno Prodi, con exactamente las mismas fuerzas políticas con la excepción de Rifondazione y casi exactamente los mismos hombres) ha sido inmediatamente desmentida por la acción del gobierno que ha aplicado la receta liberal clásica de financiación de las empresas, realizado cortes enormes en los presupuestos sociales y aumentado los gastos militares así como por la formación del Partido Demócrata que ya hemos mencionado.
• La idea de la “ permeabilidad” al conflicto social del gobierno Prodi ha sido finalmente enterrada de forma definitiva la tarde del 17 de febrero, cuando frente a la enorme manifestación de Vicenza contra la construcción de la nueva base militar estadounidense Prodi respondió que “ la base se hará de todas formas” .
El fracaso del gobierno
La tercera crisis, es la crisis gubernamental. Evidenciada por factores diferentes, como el conflicto sobre la base militar de Vicenza y el comportamiento de viejos demócrata cristianos como Andreotti y Cossiga, tiene su fuente en las desilusiones y el desencanto del electorado de centro izquierda.
El gobierno Prodi ha barrido muy rápidamente muchas de las esperanzas que su victoria había suscitado. Habíamos podido ver un cierto grado de desilusión ya en los silbidos de Mirafiori /4. Pero el caso de Vicenza, con la actitud sorda y ciega de Prodi y de D´Alema, ha manifestado claramente la toma de distancias. Ninguna de las componentes del futuro Partido de la izquierda ha querido, sin embargo, sacar un balance de esta realidad. Han optado por apoyar incondicionalmente al gobierno, incluso en lo que concierne a sus misiones de guerra, y han redescubierto el valor de la realpolitik y de la supervivencia de la clase política en detrimento de las ilusiones y esperanzas brotadas en Porto Alegre y Génova /5. Quienes se han sustraído a este esquema y a esta lógica política (como Franco Turigliatto), han sido inmediatamente clasificados en la categoría de “ política testimonial”, “ pura y dura” pero incapaz de ninguna eficacia. Demuestran sin embargo la degeneración en la que ha entrado la izquierda actual.
Una izquierda diferente
En nuestra opinión, si la izquierda alternativa quiere responder a esta crisis, debe permanecer anclada en los valores fundadores y no debe renunciar a la radicalidad anticapitalista. Quienes dicen que el rechazo de los compromisos y de las mediaciones favorece la vuelta de la derecha y de Berlusconi /6 se equivocan. En realidad es favoreciendo las políticas guerreras y antisociales como se facilita verdaderamente la revancha de la derecha. Por otra parte, sólo un año después de la victoria electoral de 2006 contra la derecha, muchos de los sondeos indican que si las elecciones tuvieran lugar hoy, la derecha triunfaría con el 55% de los votos.
Nos oponemos pues, y lo hemos expresado públicamente, a la enésima remodelación de las clases políticas, siempre parejas y que no cambian nunca. No estamos disponibles por nuestra parte a retomar el camino del “compromiso social” a favor del cual el futuro Partido de la izquierda se ha pronunciado ya, intentando cerrar la anomalía que representa Refundación Comunista en el mapa político italiano. Se trata de un cierre tanto en el plano del contenido como en el del centro de gravedad que se quiere dar a la izquierda: encerrada en la perspectiva del gobierno, fundada en una lógica de mediación, incapaz de pensar una alternativa a la izquierda liberal. Si el Partido Demócrata quiere definir un bloque moderno de la burguesía democrática y progresista, con el objetivo de gobernar con votos populares, el Partido de la izquierda (nombre que hace referencia al Die Linke alemán) que imaginan Bertinotti y Mussi /7, Diliberto /8 y Boselli /9 se parecerá a una nueva socialdemocracia en cuyo seno cohabitarían los socialistas “ reformistas” y los socialistas “ maximalistas” /10, como al comienzo del siglo XX.
Por nuestra parte, decimos que no a esta perspectiva y nos disponemos a relanzar la construcción de una Izquierda alternativa. Alternativa frente a las derechas, pero también alternativa frente al centroizquierda de gobierno, al centroizquierda moderado, al centroizquierda que vota a favor del compromiso social.
La izquierda alternativa deberá estar ante todo opuesta a la política actual, la de la guerra y del liberalismo. Esto significa que no votará la guerra. No votará la “ contrarreforma” de las pensiones, no votará las grandes obras de destrucción del medio ambiente; tampoco se plegará a compromisos con los revanchistas de la jerarquía vaticana. La izquierda alternativa es “ sin si y sin pero” /11. Hemos intentado representarla durante estos últimos meses en el Parlamento, lo que ha provocado un gran debate y nos ha valido medidas disciplinarias como la expulsión de Franco Turigliatto del PRCpero ha provocado también una discusión y una gran clarificación en el seno del PRC.
Sólo una Izquierda alternativa toma como punto de partida las luchas y los movimientos sociales y sobre esa base pretende reconstruir un proyecto de recomposición social, y en consecuencia, de recomposición política. En lo inmediato, hablar de la izquierda alternativa significa construir “ la oposición social” al gobierno de Prodi. La decisión de conceder en el Senado una “ confianza técnica” a ese gobierno (mientras que en
El fin del ciclo de Rifondazione
Todo esto abre evidentemente un enorme problema en el seno de Rifondazione Comunista, que se dispone a cambiar su propia perspectiva política. Pensamos que el ciclo de Rifondazione se acaba y que ese partido ha agotado su recorrido. La decisión de depender de las opciones del gobierno, de votar la guerra, de recurrir al antiguo método de las expulsiones y las depuraciones (y también al linchamiento político y moral), la de emprender al mismo tiempo la constitución de un nuevo sujeto político, del que la fundación de
El Partido de
El proyecto de
El PRC no parece ser capaz, si no se supera a sí mismo, de proponer una nueva fase. A los ojos de la mayoría del partido, es justamente esta superación la que debe permitir su principal proyecto, es decir
La Izquierda crítica por una izquierda alternativa
Si Rifondazione ha concluido su ciclo y si ha, sustancialmente, fracasado en su objetivo de recomponer una izquierda de clase y anticapitalista, sacamos de ello hoy, la conclusión de que este objetivo debe ser buscado siguiendo nuevos caminos.
Se trata de un objetivo muy difícil de alcanzar, y se ha hecho aún más arduo debido al fracaso de la refundación que acabamos de conocer. A propósito de esto, no hay que hacerse ilusiones: una derrota de la izquierda produce nuevas desmoralizaciones y retrocesos en particular en ausencia de una alternativa clara. Ser capaz de mantener una perspectiva de construcción de una izquierda anticapitalista es, sin embargo, indispensable si queremos conservar referencias y prácticas que ofrezcan al anticapitalismo consecuente su punto de apoyo.
Las formas que tomará esta nueva fase no son previsibles. Probablemente, no seguirán los caminos tradicionales a los que la izquierda está habituada. En lo que nos concierne, pensamos que la reorganización debe, en primer lugar, producirse sobre las consignas centrales y sobre los contenidos, antes de dotarse de formas organizativas.
Lo que es seguro, es que no entraremos en una fuerza neosocialdemócrata y que mantendremos viva la opción de una izquierda anticapitalista, ecologista, feminista, internacionalista. Éste es el eje del trabajo de construcción que nos damos.
Construyendo el movimiento y las luchas sociales, acumulando experiencias, hacia una vanguardia en positivo, alrededor de un proyecto compartido. Es por esta razón por la que hemos tomado la decisión de fundar la nueva asociación Izquierda crítica que en su primera coordinadora se ha convertido en “
Pues la constitución de un nuevo instrumento de iniciativa política de un “ sujeto político” como nos gusta decir en Italiano significa que el espacio de la izquierda anticapitalista se reduzca a ello. La dificultad de la fase social, los límites del movimiento, el estancamiento del conflicto entre las clases y la prosecución de la crisis del movimiento obrero, siguen imponiendo la necesidad de actuar en el terreno de la recomposición política. El hecho de que eso sea más difícil hoy que en el pasado no excluye que nuestro eje de trabajo sea aún la afirmación de una izquierda anticapitalista, amplia, plural, democrática, feminista, ecologista e internacionalista.
Centralidad de la recomposición social
Se trata de un proyecto que concierne a toda la izquierda en Europa, abandonado por la izquierda europea y por su estrategia de alianza orgánica con la socialdemocracia, sabiendo que la recomposición necesaria debe tener, más claramente que al comienzo de los años 1990, una marca anticapitalista y de clase muy clara. Inmediatamente después de la caída del muro de Berlín y la descomposición de
Hoy, el proceso de recomposición puede servirse de ciertas experiencias importantes: la italiana, la brasileña y en otro terreno, los casos francés e inglés (vale la pena señalar que se trata de los cuatro países más comprometidos e influyentes en el movimiento altermundialista). La cuestión del gobierno en un país capitalista y/o imperialista aparece como decisiva: ¡subestimarla tras lo que ha ocurrido en Brasil y en Italia puede ser mortal! Es este debate el que deberá enfrentar la izquierda anticapitalista europea -que Rifondazione no ha abandonado por azar - teniendo hoy la ocasión de dar un salto cualitativo, no tanto en el terreno del debate sino sobre todo en el de la iniciativa política y social. Izquierda crítica está absolutamente dispuesta en ponerse a trabajar en ello.
Del fracaso del proyecto refundador emerge sin embargo la centralidad de un proceso de recomposición social renovada. Y la cuestión sindical es en este terreno la más abierta. Debemos tener una reflexión adecuada sobre este tema, pues sin un proyecto aunque sea parcial de enraizamiento y de recomposición social no habrá reconstrucción de una izquierda de clase. También es preciso proseguir la reflexión sobre el movimiento altermundialista, sobre la crisis particular que se manifiesta hoy entre la política organizada, a menudo compuesta de las clases políticas profesionales, y la sociedad, de forma que se pueda definir mejor lo que deberían ser unas vanguardias políticas y sociales. Se trata de un proceso de reflexión que hace necesario para la izquierda revolucionaria una nueva fase de “ aprendizaje social” para reconstruir el enraizamiento y la integración en estos procesos.
*Salvatore Cannavò, miembro del Comité Internacional de
NOTAS
1/ Fausto Bertinotti, que ha dejado la plaza de secretario del PRC y se ha convirtiendo en el presidente de
2/ La conferencia de organización del PRC, celebrada en Carrara entre el 29 de Marzo y el 1 de Abril del
3/ Franco Turigliatto, senador del grupo mixtoIzquierda Crítica, ha sido expulsado del PRC tras haber rechazado votar en el senado a favor de la guerra llevada a cabo en Afganistán y a favor de la nueva base militar estadounidense en Vicenza. En solidaridad con él, Salvatore Cannavò ha anunciado su autosuspensión de la dirección del partido.
4/ Los obreros de FIAT pitaron a los dirigentes de las tres confederaciones sindicales
5/ Alusión a los primeros foros sociales mundiales y a la gran manifestación internacional contra el G8 en Génova en julio de 2001, manifestación en la que los militantes del PRC jugaron un papel dirigente.
6/ Se ha convertido en una verdadera obsesión de la izquierda “ oficial” italiana, confirmada por la respuesta dada por Bertinotti a los estudiantes que le contestaron en la universidad de Roma: “ quien se pone al margen del compromiso, se pone al margen de la política” .
7/ Fabio Mussi es Ministro de Universidad e Investigación desde mayo de 2006 y dirige la principal corriente de la izquierda de los DS. La corriente que encabeza, “ A la izquierda. Por el socialismo europeo” , ha obtenido el 15% de los votos en el último congreso de los DS. Han constituido grupo parlamentario propio, Izquierda Democrática, proyecto destinado a confluir en el partido de la izquierda en oposición a la constitución del Partido Demócrata. La otra corriente que ha anunciado su salida de los DS, es la encabezada por Gabino Angius, “ Por un partido nuevo. Democrático y socialista” , que ha obtenido el 9% de los votos en el último congreso.
8/ Oliviero Diliberto es actualmente secretario del Partido de los Comunistas italianos (PdCI), un partido fundado por Armando Cossutta después de que este último abandonara el PRC en octubre de 1998, cuando la dirección del PRC (con el apoyo de los compañeros que fundarán bastante más tarde
9/ Enrico Boselli es presidente y dirigente nacional del pequeño partido socialista, los Socialistas Demócratas italianos (SDI). Fue miembro del grupo socialista en el Parlamento europeo en 19992004.
10/ Los maximalistas fueron una corriente del socialismo italiano fundada en 1919 por Giacinto Menotti Serrati. Defendía verbalmente los objetivos anticapitalistas y revolucionarios del socialismo, pero en los hechos llevaba a cabo una política reformista que privilegiaba la actividad parlamentaria.
11/ Alusión a los eslóganes del movimiento pacifista, particularmente masivo en Italia, exigiendo la retirada incondicional es decir sin “ si” y sin “ pero” de las tropas italianas de Irak y de Afganistán.
12/ Lucio Magri, periodista y hombre político italiano, colaborador del periódico IL Manifesto, formó parte del PRC de
13/ Del nombre de Pietro Ingrao, que fue tras la segunda guerra mundial la indiscutible referencia de la corriente “ marxistaleninista” en el seno del PCI, y luego el dirigente de su ala izquierda oficial. Tras haber pasado del PCI al PDS en 1991 siguiendo la mayoría, acabó por adherirse al PRC en 2004.
Traducción: Alberto Nadal