Crónica de la manifestacíón contra las guerras imperialistas. Granada, 5 de abril

Miércoles 9 de abril de 2008

Txus - ERA Granada

Cinco años después, la protesta contra la guerra de Iraq volvió a las calles de Granada. Bajo el lema Por la humanidad, por la paz. No a las guerras imperialistas, tropas fuera ya, alrededor de 300 personas asistieron a la convocatoria del Foro Social de Granada “Otro mundo es posible”, muy lejos de las 150.000 que en esta misma ciudad se manifestaron en la jornada histórica del 15 de febrero de 2003, cuando todavía no se había producido la invasión en busca de armas de destrucción masiva. 

Pero es que esta vez no estaban el Grupo Prisa, ni el Rector de la Universidad de Granada para hacerse la foto, ni el partido del Gobierno que en los próximos cuatro años gobernará “para los que no tienen de todo”; ni otros muchos que, en funerales de Estado, lloran la muerte de algún soldadito español en “misión humanitaria”; o la muerte de algún “luchador por la libertad” víctima del terrorismo, bien porque les pilló cerca, bien porque les pudo tocar a ellos. Tampoco estuvieron los tres grandes periódicos de la capital granadina: el Ideal (Grupo Vocento), La Opinión de Granada (Grupo Moll - Prensa Ibérica) y Granada Hoy (Grupo Joly), que no dedicaron ni una sola línea en sus páginas el día posterior a la manifestación. Al parecer, ya no es motivo de noticia la existencia de un país destruido con sus cientos de miles de muertos, torturados o refugiados; como tampoco lo es la masacre de Palestina, los continuos bombardeos sobre Afganistán o la presencia de tropas extranjeras en Líbano.

Y contra esto último nos manifestamos el pasado sábado por la tarde. La manifestación partió del Paseo del Salón y recorrió las principales arterias de la ciudad hasta llegar a los Jardines del Triunfo. Tras la pancarta de cabeza, se podían distinguir los cortejos del Sindicato Andaluz del Trabajo, de la Coordinadora Sindical de Estudiantes y del Espacio Revolucionario Andaluz, estos dos últimos los más animados y ruidosos. Durante el trayecto las consignas más repetidas fueron contra los USA e Israel, y a favor de la lucha de los pueblos palestino e iraquí. Pero también se oyeron gritos contra los gastos militares, contra la presencia de las tropas de ZP en el extranjero o contra la OTAN y sus bases.

La jornada concluyó con la lectura de un manifiesto que también incluía referencias sobre Irán, Colombia, Venezuela o el Sáhara, y que se cerró de la siguiente manera: Las guerras y ocupaciones continúan. Las protestas también. Tantas veces como haga falta, volveremos a gritar: ¡no a la guerra! ¡no a la guerra! ¡no a la guerra!

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