Crónica desde Belem

Viernes 30 de enero de 2009

Josu Egireun

Hoy la jornada ha transcurrido entre los habituales seminarios, la reunión preparatoria de los movimientos sociales que tendrá lugar mañana y un encuentro con los presidentes de Bolivia (Evo Morales), Paraguay (Fernando Lugo), Ecuador (Rafael Correa) y Venezuela (Hugo Chavez).

Los seminarios siguen su curso normal cuando uno los encuentra, porque la discordancia entre el programa y la ubicación de los seminarios enerva siempre un poco y entre ellos lo más destacable son dos cosas: una la presencia de los ministros del gobierno de Lula en ellos (12 ministros acaparando el Foro) y la radicalidad de su discurso, que no tiene que ver con lo que hacen en el Gobierno pero que marca la temperatura del Foro, una temperatura muy radical en la que no tienen mucha cabida los discursos moderados. Y esto es una buena señal, como lo es el ver que ha habido centenares de activistas que han viajado de todo el Cono sur hasta Belém para participar en el Foro y estos viajes los han realizado en autobuses (sólo para llegar de Rio de Janeiro a Belem el autobús necesita tres días de viaje...), lo que muestra el interés del Foro y la acititud militante, encomiable, de esta gente. Algo inimaginable en Europa. Y aparte de eso, la manifestación callejera permanente contra el capitalismo, para decirlo claro. Porque aquí entre la población del Foro no existen esas filigranas intelectuales para diseccionar el neoliberalismo del capitalismo. Máxime con la radicalidad añadida del movimiento indígena que reivindica que su cosmovisión de la vida ("el buen vivir") está en radical oposición al capitalismo.

Este año la declaración de los movimientos sociales, si en la reunión de mañana pasa la propuesta de texto (un texto hecho en condiciones un tanto críticas: muchas delegaciones ausentes, dificultades de comunicación, etc.) tendrá dos puntos fuertes: una afirmación tajante de que esta crisis no tiene salida dentro del sistema capitalista y que hay que avanzar una dinámica de luchas anticapitalistas; la segunda, el llamamiento a una semana mundial de acción porque, como decía Joao Pedro Stédile (drigente del MST) en la reunión preparatoria a este capitalismo hay que confrontarlo a nivel internacional. Es ahí donde hay que modificar la relación de fuerzas.

La reunión con los presidentes organizada por una veintena de movimientos sociales pero sobre todo por el MST, con una asistencia restringida (con invitación cerrada) de cerca de 1200 personas sirvió para conocer más de cerca cómo entienden ellos los procesos en sus países y las relaciones con los movimientos sociales. Hay una reafirmación de ruptura con el capitalismo y la reivindicación de lo que se conoce como el "socialismo del siglo XXI" como alternativa al capitalismo. Un socialismo que fue desgranado por Rafael Correa, con un punto de partida nítido de ruptura en relación a las experiencias conocidas. La afirmación de que más que vivir en una época de cambios asistimos a un cambio de época donde hay que avanzar nuevos proyectos que han de basarse en la justicia social, la igualdad de género, el compromiso con la naturaleza (en especial la amazonia) el control de los recursos naturales... y un compromiso con la paz con un rechazo expreso de la violencia y la pena de muerte.

Fernando Lugo aprovechó la ocasión para incidir más en los mismos temas aprovechando la ocasión para exigir a Brasil que reconozca la soberanía de Paraguay sobre sus recursos naturales y se de por concluidos acuerdos bilaterales (acordados en tiempos de sus respectivas dictaduras) por los que empresas brasileñas esquilman los recursos de Paraguay.

Evo Morales aprovechó la circustancia para recordarnos que desde que llegó al Gobierno se ha encontrado sólo, olvidado y abandonado por los movimientos sociales internacionales. Se declaró contento de haber sido invitado al acto porque creía que los movimientos sociales se habían olvidado de él en un proceso como el boliviano en el que las presiones internas y externas son terribles. Hizo un llamamiento a no dejarlo sólo y no olvidarse de Bolivia.

El discurso de Chaves es más conocido, sobre todo reivindicación del ALBA y de un proceso bolivariano para la región con iniciativas alternativas a las impulsadas por las potencias: el Banco Sur frente al FMI y el Banco Mundial, el Tratado de Comercio de los Pueblos (iniciativa de Evo Morales) frente a los tratados de libre comercio impulsados para la región, etc.

Los cuatro haciendo incapié en el hecho de que sus gobiernos han surgido de procesos populares y tienen que crecer y desarrollarse al calor de los mismos. Como dijo Correa, hemos alcanzado la fuerza suficiente para derrocar gobiernos neoliberales y sumisos, pero es necesario acumular mucho más para consolidar un proyecto alternativo.

Todo esto sitúa entre los movimientos sociales la necesidad de entender la importancia de estos procesos y articular su agenda pensando también en cómo reforzarlos. Una tarea que va más allá de la solidaridad clásica tal y como la hemos conocido en épocas pasadas. Pero todo está por hacer y ello exige, en primer lugar, articular una mejor coordinación de los movimientos sociales a nivel internacional.

Finalmente, el encuentro fue también un espacio para denunciar la masacre de Gaza y solidarizarse con el pueblo palestino.

Concluir informando de los malos métodos de los sectores más moderados del Foro (Cándido Gribowsky de Ibase y otros) que ante esta convocatoria a los cuatro presidentes que dejaba fuera de la misma a Lula organizaron a toda prisa un mitin abierto de los cuatro presidentes con Lula para darle un barniz de izquierda a quien ve que de cara a las próximas elecciones la candidata Heloisa Helena (expulsada hace cuatro años del PT y actualmente candidata del PSOL) alcanza el 20% del escrutinio y goza de una popularidad enorme (la gente le retiene en la calle al pasar). Aparte de esto, este sector del Consejo llega al punto de convocar una reunión privada por Lula en el Hotel Hilton de la que sólo se informa a algunos miembros del Consejo Internacional y no a todo el Consejo. Ver para creer.

Josu Egireun (29-01-09)

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