El anticapitalismo será
feminista o no será
Revolta Global-Esquerra
Anticapitalista
El pasado sábado día 30 el
Grupo de Mujeres de Revolta Global-Esquerra Anticapitalista organizó
en el Ateneu Rebel (Barcelona) una cena para dar a conocer la
candidatura de la organización a las elecciones europeas del 7 de junio
y para explicar y debatir las dimensiones y componentes antipatriarcales
de su programa. Más de treinta mujeres asistieron para hablar, entre
comida casera y buen humor, de la necesidad de situar en el centro de
la izquierda anticapitalista, propuestas y reivindicaciones feministas
para poner fin a cualquier opresión existente por razón de género
o de orientación y/o condición sexual.
Durante la cena, Sandra
Ezquerra, militante de Izquierda Anticapitalista, explicó el proceso
de elaboración del programa electoral y destacó la importancia que
tiene en este contexto de crisis financiera, económica, social y ecológica,
hablar de la crisis de los cuidados que las estructuras familiares patriarcales,
la reincorporación de miles de mujeres en el mercado laboral y el debilitamiento
del estado del bienestar, entre otros factores crean. Denunció que
la sociedad actual está construida en torno a la idea del beneficio
económico y que cuestiones tan esenciales como el cuidado y el bienestar
de las personas quedan recluidas como actividades invisibles, no productivas
y “cosas de mujeres”. También habló de la situación de especial
vulnerabilidad y precariedad que las mujeres padecemos en el mercado
laboral y de la necesidad de introducir regulaciones laborales para
acabar con ellas. Seguidamente, Ezquerra expuso las reivindicaciones
de Izquierda Anticapitalista para poner fin a todas las violencias machistas
y a los diferentes tipos de explotación que las mujeres padecemos,
así como a todo tipo de discriminación y violencia ejercida por razón
de condición u orientación sexual.
A continuación, Sandra
Campañón, militante también de Izquierda Anticapitalista y participante
en la lista electoral, hizo una exposición del actual proceso de reforma
de la ley del aborto en el Estado español y criticó duramente aspectos
del anteproyecto de ley como la obligatoriedad de las mujeres a reflexionar
sobre su decisión durante tres días o la polémica creada en torno
a la edad mínima para abortar sin consentimiento paterno. Si una persona
es capaz de tomar decisiones a los 16 años sobre casi cualquier
tratamiento médico y se la considera suficientemente madura para convertirse
en madre, también se la tendría que considerar preparada para llevar
a cabo una interrupción voluntaria del embarazo. Campañón
denunció el hecho que el anteproyecto de ley no saca el aborto fuera
del Código Penal y enfatizó la necesidad de seguir trabajando dentro
del movimiento feminista para luchar contra los ataques conservadores
al derecho de las mujeres para decidir sobre nuestro propio cuerpo y
alcanzar una legislación a escala europea que garantice el aborto libre,
gratuito e incluido dentro de la Sanidad Pública.
Entre intervenciones de otras compañeras, música anticapitalista, videos que nos recordaban que “contra la crisis y la Europa del capital, vamos en serio”, y proyecciones de fotografías de las luchas de las mujeres, la noche nos permitió acercar a más mujeres a nuestro proyecto y nos recordó, una vez más, que el anticapitalismo, será feminista o no será.