Comunicado del WZZ “Sierpien 80”/ www.vientosur.info
Recientemente en Polonia la policía irrumpió en la sede de la Comisión
Nacional del WZZ “Sierpien 80” (Sindicato Libre “Agosto ‘80”) en la
ciudad de Katowice y detuvo al presidente de esta organización Boguslaw
Zietek. Lo hizo por orden de la fiscalía local de Wroclaw, la cual, en
la justificación de su orden, pretendía que acusaba a Zietek de que,
hace más de un año, había organizado una “huelga ilegal” en la planta
de FagorMastercook en Wroclaw.
Fagor Mastercook es la sucursal polaca del grupo Fagor Electrodomésticos que forma parte de la Corporación Mondragón.
La fiscalía mintió a la policía, porque el 26 de junio último anuló la
investigación del caso. Varias horas después de la detención de Zietek,
la policía se dio cuenta que la fiscalía la indujo en error y liberó al
dirigente sindical.
Esta acción sin precedentes es un nuevo acto de la represión
antisindical llevada a cabo o inspirada por la dirección de
FagorMastercook, la cual instiga los órganos represivos a las acciones
que persiguen golpear a un sindicato legal para vengarse por una
disputa laboral llevada a cabo por este sindicato.
He ahí una breve reseña de las acciones represivas emprendidas por el consejo de administración de FagorMastercook:
La planta contrata muchísimos trabajadores por un tiempo determinado,
es decir con contratos de trabajo temporales. Ellos cobran los salarios
muy bajos. En febrero de 2008 la organización de empresa del WZZ
"Sierpien 80” entró en una disputa laboral con la dirección de la
planta pidiendo un aumento de salarios de 1.000 zlotys (300 euros).
Durante varios meses el sindicato negoció con la dirección, sin efecto,
porque ella rechazaba cualquier concesión. El 2 de junio de 2008 el
sindicato organizó una huelga de advertencia de dos horas, seguida por
casi todos los trabajadores del turno. Inmediatamente después de esta
huelga, se desató la represión. Por participar en la huelga y
pertenecer al sindicato, se despidió a varios trabajadores, aunque
gozaban de buena opinión de sus superiores inmediatos. Luego, a fines
del mismo mes, el sindicato organizó un referendo en el cual un 90% de
los asalariados que participaron votaron por una huelga indefinida, ya
no de advertencia, sino propiamente dicha.
En respuesta, la dirección de la planta reprimió a los trabajadores
empleando a los vigilantes exteriores que, armados de porras y
paralizadores, seguían y controlaban a la gente, los registraban en la
entrada a la planta y se desplegaban armados de escopetas de cañón liso
para intimidar a los que manifiestaban frente a la puerta. Hasta
entonces las medidas represivas como éstas no se conocían en Polonia.
Fagor Mastercook era y sigue siendo la primera empresa que las aplica.
Enseguida, violando la legislación laboral, se despidió a los dos
vicepresidentes de la organización de empresa del WZZ “Sierpien 80”.
“Para nosotros es una experiencia muy instructiva”, explicó Zietek en una entrevista publicada el 2 de agosto de 2008 por el diario vasco Gara. “Sabíamos
que las casas matrices de Fagor Electrodomésticos y de la Corporación
Mondragón son cooperativas de trabajadores. Nos imaginábamos
ingenuamente que sus consejos rectores y de dirección eran sensibles a
que en las sucursales en otros países se respetaran los derechos y los
intereses elementales de los trabajadores, aunque estas sucursales no
son cooperativas sino empresas capitalistas «convencionales». Y que
probablemente no sabían lo que pasaba realmente en una planta tan
lejana como la de Wroclaw. Que bastaba informarlos para que la
situación mejorara.
Nos equivocamos completamente. Cuando informamos el consejo rector del
grupo Fagor, la represión se recrudeció. Todo indica que, en vez de
contener a la dirección de la planta, se la autorizó a quebrar la
resistencia obrera con una ferocidad aún mayor. Comprendimos por que
era así cuando nos enteramos de que la dirección de Fagor Mastercook
vendió diversos inmuebles que pertenecían a la planta por 27 millones
de zlotys y en vez de invertirlos en el desarrollo de la planta en
Wroclaw, los distribuyó como beneficio extraordinario a los
socios-trabajadores de la cooperativa matriz."
“Las multinacionales como Fagor
operan en Polonia en las ’zonas económicas especiales’ gozando de
ayudas públicas, exenciones fiscales y alivios impositivos que alcanzan
millones de zlotys. Pero esto no les impide maximizar sus ganancias
mediante una explotación abusiva del trabajo y una violación brutal de
los derechos laborales. Por esta razón, en Polonia son, de hecho,
’zonas especiales de superexplotación”, dice el presidente de WZZ “Sierpien 80” Boguslaw Zietek.
Katowice (Polonia), el 29 de octubre de 2009.
Comisión Nacional del WZZ “Sierpien 80”