Declaración de la Conferencia Nacional del NPA para las elecciones presidenciales

Martes 28 de junio de 2011, por Mar

En Grecia, en España y en el conjunto del mundo árabe, millones de manifestantes se oponen a las políticas de las clases dominantes y de los estados para hacer pagar la crisis a los trabajadores y a los pueblos. En Francia, la patronal, Sarkozy y su gobierno han emprendido ataques violentos y reaccionarios contra los trabajadores, las trabajadoras, todas las mujeres, los jóvenes y los inmigrantes. El NPA no ha dejado, desde su creación, de proponer la unidad más amplia para oponerse a esos ataques, de impulsar y de participar en todos los marcos unitarios que permiten ser útil en este sentido.

Con ocasión de las elecciones que se aproximan, presidenciales y legislativas, queremos prolongar esas batallas cotidianas haciendo oír la voz de los explotados y explotadas y de los oprimidos y oprimidas, del mundo del trabajo, de los y las inmigrantes, de las mujeres, de la juventud, de todas las víctimas de la austeridad puesta en pie por un estado sometido a los bancos y a la patronal, que utiliza el racismo y la xenofobia para dividirnos. A partir de las posiciones debatidas y adoptadas por nuestro partido desde su fundación, defenderemos un programa de ruptura con el capitalismo, por un reparto diferente de las riquezas, para que los asalariados y asalariadas, el conjunto de la población no pague la crisis. Es un programa por las luchas, por su generalización. Es la única vía, frente a la crisis social, política y ecológica que no puede resolverse en el marco de una alternancia, del respeto de las instituciones y de la propiedad privada. Un programa que no podrá ser defendido más que por un gobierno de los trabajadores y trabajadoras, pues solo su control y su intervención directa pueden derrocar el sistema y cambiar el mundo.

En este contexto, la Conferencia Nacional del NPA presenta la candidatura de Philippe Poutou a la elección presidencial, militante del NPA, obrero sindicalista que anima desde hace años la lucha contra el cierre de su empresa frente a uno de los primeros grupos industriales mundiales del automóvil. Es un candidato anticapitalista, feminista, ecologista, antirracista, internacionalista.

En estas campaña, el NPA hará oír una voz que condena sin ambigüedades las políticas de austeridad, sean realizadas por la derecha o, como en Grecia y en España, por la izquierda. Una voz totalmente independiente del PS y de sus aliados. El NPA exige la anulación de la deuda, la expropiación de los bancos, su socialización en un único servicio público financiero bajo el control de la población y de los asalariados y asalariadas movilizados, la defensa y la mejora de los servicios públicos hoy atacados con el pretexto de la deuda.

Desea dejar oír una voz que apoyándose en sus movilizaciones, defienda los intereses de asalariados y asalariadas contra las supresiones de empleos, por la prohibición de los despidos, el reparto del tiempo de trabajo y por aumentos salariales (300 euros netos de aumento, ningún salario por debajo de 1.600 euros netos, indexación de los salarios con los precios) y por acabar con el sufrimiento en el trabajo.

Una voz que, algunos meses después de la catástrofe de Fukushima, exija la salida de lo nuclear y la expropiación de EDF, GDF-Suez, Areva, Total… en un servicio público que permita una planificación energética.

Una voz por la igualdad de los derechos, por la regularización de todos los sin papeles, contra todas las leyes y discursos racistas, particularmente la estigmatización de los gitanos y los musulmanes. Una voz que combata al Frente Nacional, que oculta su apoyo a todos los ataques capitalistas tras un discurso pseudosocial.

Una voz que denuncie y combata firmemente la opresión de las mujeres, luche contra todas las discriminaciones y violencias que sufren en las esferas tanto pública como privada. Una voz que luche contra las discriminaciones que sufren las personas lesbianas, gays, bi, transgéneros e intersexuales.

Una voz que rechace la omnipotencia de la patronal y de los bancos, que luche por una democracia real, como exigen los Indignados de la Puerta del Sol en Madrid, los manifestantes griegos de la plaza Syntagma y los revolucionarios del mundo árabe. Una voz que exprese su solidaridad con todas las luchas de los oprimidos, comenzando por la del pueblo palestino.

Una voz para construir una Europa diferente, fundada no en la competencia sino en la solidaridad. Una Europa de los trabajadores y de los pueblos. Una voz que se oponga a la intervenciones militares y económicas del imperialismo francés.

En las próximas citas electorales, haremos oír un programa de urgencia, defenderemos una política tan fiel a los intereses de los trabajadores como la derecha y la UMP, actualmente en el gobierno, lo son a los intereses de los ricos.

Tenemos por delante una batalla difícil y muchos obstáculos. En un primer momento debemos lograr entre todos y todas superar la barrera de las 500 firmas de electos que la ley antidemocrática nos impone. Se han expresado divergencias en el curso de la preparación de la Conferencia Nacional y en su seno. Nuestro partido debe ahora reagruparse alrededor de las exigencias fundamentales que nos reúnen.

Nuestra campaña asociará una dirección colectiva y portavoces de campaña, entre ellos nuestras dos portavoces nacionales y Olivier Besancenot. Se apoyará en el conjunto del partido. Llamamos a todos y todas que lo deseen a ocupar su puesto en nuestro combate colectivo.

http://www.npa2009.org/content/philippe-poutou-candidat-du-npa-%C3%A0-la-pr%C3%A9sidentielle

Traducción: Faustino Eguberri.

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