Crisis de gobierno, el juego de Berlusconi y las cartas de Monti

Miércoles 12 de diciembre de 2012, por Mar

Antonio Moscato, militante de Sinistra Critica.

Berlusconi ha tomado la iniciativa de pasar a la oposición: primer objetivo, diferenciarse del gobierno Monti en su momento de máxima impopularidad (por el IMU (impuesto municipal inmobiliario), pero también por la contracción de los salarios reales, la caída del consumo y el empleo, muy superior a la declarada por el ISTAT (instituto de estadística) u otros organismos complacientes). Poco importa que el IMU, recomendado por la UE, haya sido decidido por el gobierno Berlusconi-Tremonti, y que el vaciado de las nóminas y la caída de la ocupación sean la consecuencia de un ataque bipartidista iniciado ya hace muchos años, aunque llevado adelante por Monti, Fornero y sus socios con particular determinación, gracias al consenso del 99% de los medios de comunicación y al de una indecente mayoría parlamentaria basada en el acuerdo. La Liga, por su parte, desde hace meses denuncia desde la oposición, la injusticia del IMU, fingiendo haber olvidado su voto a favor en Marzo del 2011, en una exultación de retórica federalista, del decreto legislativo que introducía. Como hace ya un año, por desgracia, no hay un fuerte movimiento de masas para socavar al gobierno, lo que condicionaría desde la izquierda el desarrollo de los acontecimientos, sino movimientos internos de poder dentro de la clase dominante y sus órdenes políticos.

No es casual que el irresponsable Berlusconi juegue a hacerse el responsable al asegurar que los votos del PDL permitirán aprobar a tiempo la ley de estabilidad. Buen resultado: contribuirán a sacar in extremis el enésimo hachazo, pero presentando este apoyo como un gesto altruista, un sacrificio, y por lo tanto descargando sobre el habitual “ingenuo” Partido Demócrata (centro-izquierda) la carga de apoyo con convicción, presumiblemente perdiendo parte del frágil consenso adquirido con el pequeño show de las primarias. Mientras tanto, conseguirá también impedir la aprobación de las muy modestas leyes de corrupción y la elegibilidad de condenados, así como otras medidas tales como la reducción de las provincias, etc.

¿Pero qué quiere obtener Monti con sus renuncias, anunciadas de repente, sin esperar la fecha prevista o una moción formal de censura contra el gobierno en el que podía “ver las cartas” a un PDL en crisis? Por parte de la derecha se había evitado hacer caer al gobierno, al parecer sería suficiente con montar una escena…No se excluye que las prisas de Monti se utilicen principalmente para mejorar su posición en caso de un compromiso electoral, aunque fuera indirecto. Monti podría intentar evitar un serio balance de su trabajo descargando la culpa a “quien lo saboteó”. Pero la anticipación de la votación también podría permitir al PDL relanzar la ofensiva para el día de las elecciones. Permitiría evitar que un gran campeón electoral (el Lacio, sumado a la ya significativa Lombardía) verifique una desintegración del centro-derecha y acelere el “sálvese quién pueda”.

Y Monti, que al contrario de lo que cree y estima el grupo dirigente del Partido Demócrata, es orgánicamente de derechas, no querría verse obligado a “tener que” volver al gobierno (como podría suceder “por necesidad” en caso de la inestabilidad causada por un excesivo éxito del Movimiento 5 Estrellas) a la cabeza de una coalición en la que el peso de la derecha se haya reducido demasiado.

Grillo (Movimiento 5 Estrellas, populista), ha anticipado los tiempos de sus “parlamentarias”, que no más democráticas que las primarias del centro-izquierda, pero que pueden cautivar a una parte del electorado, apareciendo como la gran novedad de la antipolítica en estas elecciones. En cualquier caso, se ha prevenido de las sacudidas de cola del viejo establishment, preparando por anticipado las listas, mientras el proyecto de “Se puede cambiar” (proyecto regeneracionista centrista) todavía está muy atrás, sobre todo si se discute más sobre a quiénes excluir o agregar (¡Ferrero propone incluso a la Italia de los valores!) que sobre programas y métodos a partir de una reflexión sobre las causas de tantas derrotas.

Resulta inútil añadir que sería fuerte la tentación de ignorar estas polémicas bizantinas entre viejos cómplices, entretejidas con inverosímiles mentiras: Berlusconi afirma que habría tiempo para reformar la ley electoral, después de haber saboteado cualquier posible reforma cambiando las cartas sobre la mesa cada día durante meses, Monti dice que renuncia sintiéndose ofendido por el juicio severo y desleal de Alfano (delfín y ex-sucesor de Berlusconi), como si Alfano fuera algo más que un maniquí teledirigido…

Pero esta farsa es posible porque falta la izquierda, no sólo en el parlamento sino sobre todo en las luchas, que continúan pero son fragmentarias y parciales, con gran dificultad para reencontrarse en un movimiento global. Y las organizaciones sindicales mayoritarias, incluida la CGIL, no tienen ninguna intención de impulsar las movilizaciones por la defensa de los intereses colectivos de los trabajadores, de los pensionistas, de los estudiantes, de los precarios.

http://sinistracritica.org/2012/12/...

Traducción de Tomás Martínez para Izquierda Anticapitalista

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