Unas pinceladas del cuadro geopolítico en Mali-Asawad

Lunes 21 de enero de 2013, por Mar

Zaidín y Lito, militantes de Izquierda Anticapitalista Granada

En primer lugar, hay que decir que el territorio de Malí está compuesto por dos zonas claramente diferenciadas: la sureña, que se encuentra dentro de la región bioclimática del Sahel con población mayoritariamente negra de diversas etnias; y la norteña, en pleno Sáhara, en la que los tuareg son mayoritarios. La región sur (40% del territorio), en la que viven en torno a los 14 millones y medio de habitantes, está controlada por etnias sursaharianas y es donde se encuentra la capital de Mali, Bamako; mientras que la zona norte, Asawad, que conforma entre el 50 y el 60% del territorio del Estado de iure de Mali está controlada por los tuareg, aunque no son la única etnia en la región, y en el que viven en torno al millón de habitantes.

Tras la descolonización francesa, las poblaciones del sur han mantenido relegada a una situación de empobrecimiento a la región Asawad, provocando una diáspora de los tuareg por la pérdida de sus medios de vida y por una falta de inversión del Estado en la región. Desde los 90 el MNLA (Movimiento Nacional por la Liberación del Asawad), una organización tuareg de carácter independentista y laicista, declara la independencia de este territorio del resto de Mali, mientras que los sucesivos gobiernos malienses, puestos y depuestos mediante golpes de estado, son incapaces de controlar esta zona del país, aunque manteniendo una visión nacionalista-expansionista sobre dicha región.

Por otra parte, tenemos dos facciones islamistas ultraconservadoras (AQMI y MUJAO) provenientes de Argelia que mantienen una disputa tanto contra el gobierno de Mali como contra el MNLA y que en la actualidad se han posicionado ventajosamente en el Asawad, controlando sus principales centros urbanos: Tumbuctú, Gao y Kidal.

Como a todas las antiguas metrópolis, a Francia le conviene mantener lazos con sus viejas colonias, ya que puede realizar convenios comerciales de favor para la primera, apostando por inestables gobiernos-rehén que garanticen sus intereses y que dependan de la antigua metrópoli. Este país europeo mantiene un interés en la zona, que refuerza de manera permanente, por lo que las distintas intervenciones no hacen más que aumentar su poder regional. Por otra parte, las milicias islamistas mantienen un interés en el Sahel (MUJAO) y el norte de África (AQMI) por las que quieren implantarse de manera efectiva, promulgando la versión más conservadora del islam, la sharía, y que sirven de excusa a los países occidentales para intervenir en las distintas regiones frente a la opinión pública occidental.

Esos mismos islamistas que son apoyados por los mismos países occidentales, en contra de las revoluciones populares, como es el caso de los Hermanos Musulmanes en Egipto o de la facción conservadora de los rebeldes libios. Esa misma esquizofrenia oportuna que ahora vuelve, intentando imponer y que a nadie convence.

Zaidín y Lito

20/01/2013

Fuentes:

http://blogs.elpais.com/3500-millon...

http://elpais.com/elpais/2013/01/18...

http://internacional.elpais.com/int...

http://internacional.elpais.com/int...

http://www.realinstitutoelcano.org/...

https://www.cia.gov/library/publica...

http://www.vientosur.info/spip/spip...

http://www.vientosur.info/spip/spip...

http://www.vientosur.info/spip/spip...

http://www.vientosur.info/spip/spip...

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