Saquemos a la mafia de la Comunidad de Madrid

Comunicado de Anticapitalistas Madrid

La investigación periodística que ha demostrado la falsificación de un título de Máster universitario por parte de la presidenta de la Comunidad de Madrid es el último capítulo de la larga trama de saqueo, corrupciones y beneficio personal que inunda al PP de la Comunidad de Madrid. La falsificación del título de Máster ha desvelado, una vez más, hasta qué punto los y las dirigentes del PP hacen uso de todo tipo de instituciones para su lucro y beneficio personal. Unas instituciones al servicio de los intereses de unos pocos y contra los intereses de la mayoría. El título de Máster fraudulento de Cifuentes es, de hecho, solo la guinda de una política que, durante largos años ya, ha significado el expolio de lo público y el deterioro de innumerables instituciones públicas que se han mostrado funcionales para una élite parásita que ha venido actuando con total impunidad.

Por otro lado, este caso también está mostrando lo que era un secreto a voces: la utilización de la Universidad Rey Juan Carlos como un entramado de colocación de cargos afines al PP. Lo que vamos descubriendo, día tras día, revela la urgente necesidad de poner en marcha cuantos mecanismos sean necesarios para investigar y auditar el funcionamiento de esa universidad. Una auditoría social y ciudadana que debería contar con la participación activa del movimiento estudiantil y sindical de dicha universidad.

A nivel parlamentario e institucional, es también urgente presentar una moción de censura que permita, de inmediato, la salida de Cifuentes (y del PP) del gobierno de la Comunidad. Pero esta moción de censura no debe ser entendida como una mera operación parlamentaria para asegurar un recambio en el gobierno de la Comunidad, si no que debe sentar las bases para un cambio efectivo en las políticas de la Comunidad con un programa que recoja algunas de las demandas sociales más inmediatas y que la oposición parlamentaria ya ha venido presentando los últimos meses. Así, el apoyo desde Podemos a la moción presentada por Ángel Gabilondo solo será útil estratégicamente si se hace desde la autonomía e independencia de proyecto, en base a un acuerdo de mínimos programáticos que no implique la entrada de Podemos en un gobierno liderado por un PSOE que, paradójicamente, ya se opuso a apoyar la moción de censura en la Asamblea de Madrid el año pasado y que se niega, sistemáticamente, a presentar una moción de censura contra Rajoy en el Congreso de los diputados/as.

En este sentido, es evidente el papel de “partido del orden” que va a jugar (y, de hecho, está jugando) Ciudadanos. Y que una posible moción de censura cuenta con nulas posibilidades de salir adelante. Por eso mismo, corresponde a las fuerzas políticas del “bloque del cambio”, a las candidaturas municipalistas y a los movimientos sociales y sindicales de la Comunidad de Madrid trabajar desde ya por una candidatura unitaria, pluralista, desde abajo y con un programa de transformación radical para las elecciones autonómicas de 2019 que revierta todas las políticas de saqueo que ha venido implementando el PP.

Pero, más allá de las iniciativas parlamentarias que puedan facilitar la salida del PP del gobierno de la Comunidad, corresponde ahora a la comunidad educativa dar una respuesta contundente frente a este caso. Tanto el movimiento estudiantil, como los sindicatos en las universidades públicas como el conjunto de trabajadores/as de la Universidad pública deben dar un paso adelante para movilizarse frente a este caso, exigiendo una depuración de responsabilidades y una investigación exhaustiva de los posibles casos vinculados a lo que puede ser una auténtica trama de títulos falsificados. Pero este caso debe servir también para volver a poner encima de la mesa la situación de la universidad pública: las condiciones de galopante precariedad del personal investigador, el aumento de las tasas académicas, el deterioro de las condiciones de estudio, etc. En este sentido, el propio proyecto de Ley madrileña de Universidades (LEMES) debe ser denunciado en cuanto supone un intento de seguir ajustando las universidades madrileñas a los parámetros de adaptación neoliberal de la educación superior. Frente a esto, una propuesta de calendario de movilizaciones desde las universidad que incluya una huelga de la enseñanza superior sería un buen camino por el que transitar en este contexto.

De hecho, es imposible desligar lo que este caso ha mostrado de lo están significando las sucesivas reformas neoliberales sobre la universidad y, en concreto, la degradación de los estudios de grado y la consiguiente utilización de los másters como una suerte de reproductor social y de clase a través de unas tasas desorbitadas. La bochornosa combinación de cleptomanía y titulitis de Cifuentes (y parece que algún compañero suyo del PP) ponen encima de la mesa la profunda desigualdad que se esconde detrás del proyecto neoliberal: mientras el estudiantado de la clase trabajadora y sus familias tienen que esforzarse para poder estudiar, a las élites se les regala todo.

Desde Anticapitalistas apoyaremos de forma activa cuantas movilizaciones se convoquen tratando de no dar ni un segundo de respiro a quienes han ido tejiendo toda una red mafiosa de corrupciones a su alrededor. Sin dilaciones. Hay que sacar a la mafia de la Comunidad de Madrid.